viernes, 16 de mayo de 2008

Motín a bordo


— ¡Esto es un atropello!, jamás me habían tratado tan despectivamente.
—C50, ¿qué te sucede?
—KK, ese hombre es una bestia…; peluda…; retrograda…; malvada...
—…Entonces…
—No ves que tanto el Contramaestre P2 como C50 se han visto humillados por el comportamiento omnipotente del Gerente PU. Si esto sigue así, pido reversión a Venus.
—Pues les recomiendo que se vayan acostumbrando porque en los niveles jerárquicos se comportan en modo tan arbitrario e injusto como el Gerente… Se creen los hacedores de la Galaxia.
—En mi situación profesional, no me queda otro procedimiento que presentar mi renuncia.
—P2, no te lo tomes a título personal, a mí también me trató peor que a una basura galáctica. Si quieres lloramos juntos y nos desahogamos.
— ¿Qué me está proponiendo? Cocinero de a bordo C50.
—Ok. Nada…, P2. ¡Qué poco sentido del humor!..., con lo que necesito distenderme.
—Podemos recurrir al vulgarmente llamado “agua y ajo”, (para los neófitos: aguantarse y a joderse) o presentar una renuncia en conjunto y abandonar la nave, con las consecuentes expulsiones por DIC, Desobediencia; Insubordinación; Conspiración.
—KK, este es mi primer trabajo, no puedo sublevarme. En más de mil pársecs volvería a trabajar de FIQ.
— ¿Entonces?, la primera opción o…
—…Nos deshacemos del Gerente PU… leí un libro: “Como matar a su jefe y no despertar sospecha”.
—Por favor, C50, en una nave, donde sólo estamos los presentes, ¡eso es absurdo!, recaerá la certeza en uno o varios de nosotros, lo mismo da…
—Pero, ¿si logramos que parezca un accidente?
Nos congeló la propuesta del Contramaestre P2, por lo fría y distante que sonó su voz.
—Bueno, dejemos las conjeturas para otra oportunidad que vamos a despertar sospechas sin haber consumado ningún plan. Debo comenzar con el escudo anti meteoros para preservar nuestras vidas.

No hay comentarios: